Previa Ultra Canfranc-Canfranc 100K / +8848mts

"Los hombres se hacen, las montañas están hechas ya"
-Miguel Delibes"- 

Hola!

No es la primera vez que os cuento que yo mucho antes que a correr llegué a la montaña de la mano de la escalada y el alpinismo, es por esto que creo que tener una conexión muy especial con este medio.

Yo, adolescente en la cima del "Huso" no había dinero para arneses pero sí ganas de escalar.

Estos orígenes me llevan a tener un relativamente bajo conocimiento en atletismo y entrenamiento pero un mayor conocimiento en montañas, vertientes, orientaciones, mitos y leyendas entorno a ellas.

Por lo tanto recuerdo aún con pelos de punta la primera vez que subí un "tresmil", el Balaitous, o la primera vez que ví un glaciar, con 17 añitos al llegar a Chamonix.

Yo con 17 años en los Alpes hecho un pimpollo. Se vé que el postureo no es algo de ahora.

Es por esto que siento un gran vínculo con la alta montaña, conozco sus vías, a sus pioneros y sus hazañas. Antes de saber que era el UTMB ya conocía las principales vías de escalada al Mont Blanc, a la Jorasses, al Dru o la Aiguillé Verté. Y antes de oir hablar de ninguna carrera en el Aneto ya conocía sus vertientes, la escalada de sus aristas y ya había esquiado decenas de veces en su glaciar.

Aún al ver el recorrido de una carrera de montaña miro primero el entorno, busco referencia de las cimas que recorre y me hago mi composición mental de como será verse corriendo allá arriba, algo hace años que ni se nos pasaba por la cabeza.

Todos los que hemos pasado horas y horas de caminata acarreando pesadas mochilas y pernoctando en cualquier lado tenemos valles, montañas o rincones especialmente entrañables.
Para mi el Valle del Aragón es uno de esos valles especiales, más que posiblemente porque mis padres han tenido casa allí desde que nací y porque es donde me calcé los esquís por primera vez y a donde acudo siempre que puedo, no queda muy lejos de mi casa.

Así que actualmente inmerso en este apasionante mundo de las carreras de montaña y el alpinismo "light" (Recuerda: si llevas material de vivac, vivaquearás... Yvon Chouinard) cuando escuché que se iba a celebrar un carrerón en el mismo corazón del valle y que recorrería todas estas cimas que en alguna ocasión he subido no dudé en ser de los primeros en apuntarme.

Fue en 2015 la primera vez que se celebraba la "Ultra Canfranc-Canfranc" que pretendía para entendernos y resumir subir a toda cima reconocible en el valle con un recorrido de entorno a 100 kms. y un desnivel de casi 9000 mts. positivos. Al principio he de reconocer que no reparé en números sino que me sedujo directamente la idea.
De todas formas la ilusión era tan grande que allí me presente en septiembre dispuesto a sobrevivir y a seguir aprendiendo de uno mismo y de los demás.

En el photocall del 2015, la que se nos venía encima!

Resultó ser un edición épica por la meteo y por ser la primera, todos estábamos a prueba, corredores, organización, voluntarios, sponsores y lo hicimos todos lo mejor que pudimos, por mi parte muy contento ya que tuve la suerte de ser uno de los poco finishers de ese año. AQUÍ os dejo la crónica de aquella vez.

Cruzando la meta en 2015 en 14ª posición.

Tras dos años posteriores en el dique seco por lesión este año volvemos al Valle del Aragón y a la Ultra Canfranc.
Analizándola un poco en comparación a su primera edición parece haber cambiado ciertas cosas para bien, como no podría ser menos. El recorrido se ve más lógico, más pulido y aunque aún desconozco la subida a Collarada por "la Rusell" el resto lo tengo más o menos conocido.

Mi único objetivo, acabar, más o menos el mismo objetivo que llevo siempre y más ahora que persigo un sueño.
El acabar una prueba de estas características ya es un reto de por sí, son muchas las circunstancias que pueden llevar al traste este objetivo así que voy a intentar llevar lo mejor controlado posible todo aquello que esté en mis manos y a rezar por que el resto de circunstancias vengan de cara.

Con tan poco tiempo por delante ya no cabe entrenar, una vez más llego a una súper prueba habiendo corrido muy poco y habiendo hecho menos monte, pero las circunstancias de la vida son las que son y por que no decirlo.. me gusta que los retos sean eso, retos, que quepa la posibilidad de no poderlos completar.
Esta circunstancia creo que le da una gran dosis de emoción al recorrido y sobretodo un extra de emoción si se consigue completar. Me da la impresión que de esta manera también soy más fiel a mi estilo, me mantengo más alerta los días antes y sobretodo durante la carrera para hacer las cosas bien y no me despisto ni confío demasiado.

Como decía aquel.... "Entrenando cualquiera lo hace".
O como dice mi mujer... " El día que entrenes..."

Hasta pronto!

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