Altitoy 2017 (10ª edición)

Debe existir un fallo cromosómico que a algunos nos impide pronunciar la palabra "NO". 

No os asustéis, este fallo cromosómico tiene algunas cosas malas pero sobretodo cosas buenas.
Lo malo, que nos metemos en berenjenales de los cuales es difícil salir airoso. Es un fallo que nos lleva a inscribirnos en pruebas de larga distancia, a llevar el límite (Si es que esto existe) más allá de lo que algunos llaman "lo normal". A veces no es fácil detectar por uno mismo este problema, os ayudará saber que uno de los síntomas se manifiesta cuando esta "gente normal" te llama loco.
Por cierto, no intentéis curaros por vuestros propios medios, yo he estado intentando incluso ver partidos de fútbol cada domingo y he probado a insultar a un pobre hombre vestido de negro que pululuba por el campo como hacía la "gente normal" pero no ha dado resultado. No intentéis escuchar música normal, vestir normal ni seguir cuentas de twitter normales, estamos enfermos.

¿Alguien ha probado este tratamiento?

Pero como os decía no saber decir "No" tiene sobretodo cosas buenas aunque conlleve salir de la ahora denominada "zona de confort" (Que términos nos buscamos).
Este fallo cromosómico te lleva a descubrir muchas cosas que habiendo dicho "No" o bien te las habrías perdido o jamás las habrías llegado a conocer, la vida pasa y las oportunidades también, merece la pena arriesgarse ¿no creéis?
Esta anomalía es enemiga del tedio, de la rutina, de la comodidad y de las tarifas planas, puede ser incómoda pero los que la sufrimos somos víctimas

Bien, pues la última en la que me vi involucrado no fue estrictamente deportiva sino que se trataba más bien de un reto casi intelectual y como os he dicho alguna vez Dios no me dio talento, me dio piernas y esta vez no iba a poder usarlas.

Los chicos de la Altitoy, seguramente bajo los efectos del génépy o de alguna otra pócima secreta gala me ofrecieron la oportunidad de ser el speaker oficial de la carrera.
El reto estaba servido, sin casi experiencia y sin controlar prácticamente 2 de los 3 idiomas que tenía que utilizar debía ser la voz de no precisamente la carrera de mi barrio sino de la mejor y más prestigiosa (Hasta ayer) carrera de esquí de montaña del Pirineo, casi nada!

Pues ahí nuestra patología no dio tregua, aunque quise dudar y pensarlo mejor en ningún momento contemplé la posibilidad de decir que no, una experiencia así se presenta una vez en la vida y tal y como me decía hoy la que a la postre sería ganadora absoluta de la prueba, lo fácil es no ir.

Lula y Ares, flamantes ganadoras Altitoy 10º edición.

Así pues con cuatro conceptos en una libreta, 4 cafés y dos plumíferos me presenté en Luz Saint Sauveur en día de autos.

Por suerte soy esquiador, he corrido Altitoy dos veces y conozco a parte del equipo organizador, sino esto ya habría sido "la de la piscina sin agua".

Vamos con las cosas buenas, nada más llegar empiezas a ver caras conocidas que te reciben con un abrazo y empiezas a conocer gente maravillosa, un par o tres (quizá más vale) cañicas bien tiradas allanan el terreno, a la cama que mañana "debutas" torero en plaza grande!

Con Nora Garay (Ternua) y Mayayo (carrerasdemontana.com)

Sin pegar ni ojo repitiendo toda la noche "Bienvenue tous a la diuxeme..." y cosas así... a las 05:00 arriba!
Es de noche cuando llegamos a la linea de salida, si te digo la verdad casi mejor, estas cosas intimas por primera vez mejor con la luz apagada, ¿no?

Me lo pienso y arranco, la notas de la libreta van funcionando y aunque hay momentos de duda vamos sacando el trabajo adelante, la gente es maja, agradecida y siempre está dispuesta a echarte un cable, además de que tampoco te hacen tanto caso como crees.

Pues vamos al ajo, consigo dar salida a la carrera recorrido A y entre esta y el recorrido B ya he aprendido mucho y ganado confianza.

Salida Jóvenes recorrido B, como van!

Compartir meta con buena gente es un lujo, ya conocía al mítico Feliú Izard que se encarga del reglamento, no falta conversación y buen rollito con su ayudante Inma y echo unas risas con la agradable Nora representando a Ternua, sponsor oficial  de la prueba. Los chicos de Kirolprobak (Eneko y Sergio) haciendo perfecto su trabajo y además más majos que majos. 

Foto by www.lameteoqueviene.com

De vez en cuando también aparecen por allí los soletes de Fanny (La truite des pyrénées, jajaja) o Olaïa, dos chicas locales super agradables que nos hacen la vida más fácil ayudándonos con mil cosas. Entre todas esta personas quiero mencionar especialmente a dos personas, una es Jaione, una persona de mirada especial, con un exquisito trato, super agradable y que además vive la Altitoy con un componente emocional extra que se le nota y que hay que conocer para valorarlo en su justa medida.

Fanny, un angelico, hablando con Inma.

Conforme avanzan ambas mañanas y esperamos a los primeros corredores bajan del monte como ángeles venidos del cielo amiguetes trazadores como Iker con el que tengo toda la confianza del mundo y con el que he vivido muchos momenticos al que quiero mogollón, el grandísimo Iñaki Sedano, un portento físico pero también intelectual, este perraco no dejó nada para los demás el día que Dios repartió las cosas buenas.

La otra persona de la que quería hablar es Ander, un "chavalico" que está hecho un "hombretón", un chico de mirada profunda y sonrisa sincera y permanente, otra joya adornada con mil atributos que vive como Jaione y ambos por motivos personales aunque por casi todos conocidos con especial emotividad la prueba, a buen seguro será quien lleve el peso de Altitoy durante muuuuuchos años y creerme que no puede estar en mejores manos.
Por allí, aunque con dificultades de comunicación a veces pasamos un buen rato con los voluntarios franceses como Cathy (Jefa del montaje de la meta), los chicos de la megafonía y admiro el trabajo de Didier, Matheo, Christine, Txema, Periko, y compañía. Y tampoco quiero olvidarme de los medios, de Sergio Garasa (Mayayo) y Darío (Desnivel) que no se pierden una. De los fotógrafos Luis Miguel López Soriano y Xabier Mata o de la catalana María Angeles afincada en Francia y gran profesional.

Iker, Jaione, Ander y servidora

¿A cuantos de estos no habría conocido si hubiera dicho "No" en su momento? Posiblemente a muchos.
¿Fue fácil? Para nada, pero tampoco fué un infierno oiga, lo pasamos bien aunque siempre bajo el yugo de la responsabilidad de tratar de no cagarla, hay que estar a la altura de la organización.
¿Mereció la pena? Sin lugar a dudas, lo que aprendes en "curso express" de estos te lo llevas contigo ya para toda la vida, ahora tenemos experiencia y la suerte de haber formado parte de un equipo excepcional.

Eskerrik asko familia Altitoy, merci beaucoup!